"Álamos" es una obra que explora la serenidad y el equilibrio a través de la sutileza de los tonos neutros. Realizada en pastas acrílicas con textura y acrílico, utiliza una paleta de colores compuesta por blanco, beige y una escala de grises. Esta elección cromática crea un ambiente tranquilo, donde la paz parece impregnar cada trazo y relieve.
Inspirada en la quietud de un bosque de álamos, la obra invita al espectador a detenerse, a dejarse llevar por la calma y perderse en la suavidad de sus formas. Cada detalle está diseñado para evocar una sensación de inmersión en la naturaleza, una conexión con la tranquilidad que solo un entorno natural puede ofrecer. A través de sus texturas, el espectador puede casi sentir el aire que corre entre los árboles, sumergiéndose en un refugio de calma interior.
